Entradas

"MONSTRUOS EN EL MURO", sobre ilustración de Fernando Ortíz M-

Imagen
   Relato : Christian Aedo J.                 “El viejo mundo se muere, y el nuevo tarda en aparecer Y en este claroscuro surgen los monstruos” Antonio Gramsci.   Esa noche volviendo del carrete, vio a un loco encapuchado haciendo un grafiti en uno de los muros frente a la cancha. No había nadie en la calle. Pensó que podía ser uno de los del Colo que pasó los límites entre las dos poblaciones, y quería dejar su marca en el corazón de Los Coyotes Azules. Cuando corrió para averiguar, el que pintaba escapó dejando los tarros de colores tirados junto a una mochila. El Rulo tomó las latas y el bolso, se quedó un rato mirando la imagen, y se fue a su casa. Despertó cerca de las tres de la tarde, era 17 y tenía un partido importante a las 20:00 por el campeonato de la villa Los Altos de Santa Juanita. Había tiempo para pasar la caña, recuperarse, y meter un par de goles. Miró la mochila con las latas tiradas en el piso. Recordó aquella sombra del encapuchado que se perdió entre

"TE VOY A DAR EL CORAZON", sobre ilustración de René Van Kilsdonk

Imagen
                                                                                                                                                                                                                                                      Texto: Miguel Higuera C. TE VOY A DAR EL CORAZON                                                                                                                   Cuando Frankie me dijo eso, lo encontré tierno, a pesar de que él siempre nos causaba algo de miedo con su figura deforme, de monstruo de terror y su eterno delantal azul. De ahí le venía el apodo de Frankie, por el monstruo de la película. Su andar desgarbado, de autómata, su voz oscura y lenta nos dejaba patente su diferencia o, como mis compañeros de facultad decían: su deficiencia. Nadie sabía a ciencia cierta su verdadero nombre y a nadie le importaba porque a pesar de vivir en un cuarto dentro del departamento de anatomía, gracias a un acuerdo tácito entre profesores y

SUDACAM , capítulo III

Imagen
 Por Miguel Higuera                                                                                                    Ilustración y Monocopia: Christiano Capítulo anterior III.- ¿Qué mierda es eso?  - Martínez miraba asombrado el techo de mi automóvil, tanto las marcas como la mancha viscosa y oscura que rezumaba aquel olor fuerte y nauseabundo.   -No tengo la menor idea- Yo continuaba nervioso mientras miraba a mi alrededor como esperando una nueva aparición de aquella sombra.   En el estacionamiento un equipo de fuerzas especiales rastreaba cada rincón. Cerca de la salida encontraron manchas iguales a las de mi vehículo, con huellas de unas pisadas deformes, como de animal que parecían las de un pájaro gigante o de un reptil. _ Ya pedí para que revisen las cámaras del lugar, así que me confirmen el procedimiento subimos a la central de comunicaciones para ver si encontraron algo- Martínez percibía mi agitación y también parecía preocupad0- También pedí al departamento forense para a

Los Susurradores de casas, capítulo II

Imagen
 II.- Susurrante no hay uno solo                                                                     Por AlexSalas     Capítulo anterior                                                                                                                                                                                                               IIustración: Christiano El viernes no tardó en llegar, Camilo quedó de juntarse con Farfán en El Cuervo, ingestarían en consecuencia y después partirían a conocer la casa recuperada.   Camilo llego antes como siempre, su amigo tarde y acompañado por una joven media punky, asunto que no gustó nada a Camilo que “ prefería mantener reserva con desconocidos o desconocidas ”, y no se aguantó, antes de que Farfán   le presentara a su amiga, le dijo   que era tema delicado, que había que ser discretos y que las personas involucradas debían ser sensibles y sobre todo   buenos para tomar. -Oye, Cecy, es de mi absoluta confianza, y además le encanta el c

Apuntes al vuelo a la introducción distópica de Terry Gilliam en Brazil

Imagen
                                                                                                                Por Daniel Rojas Pachas   Brazil de 1985 dirigida por Terry Gilliam nos sitúa en una apócrifa metrópolis retro futurista en algún punto del siglo XX y sintetiza una maquinaria social automatizada que conjuga la burocracia y paranoia Kafkiana con el control y autoritarismo Orwelliano. La escena inicial del film previa a la aparición del título “Brazil” formado con estridentes luces de neón fucsia y turquesa sirve como un prólogo cargado de gran cantidad de simbolismos y códigos que luego se desarrollarán en profundidad a lo largo de toda la trama. Lo primero que experimentamos es un paseo por nubes oníricas que marcarán el tono de la cinta, un transitar errático por los frágiles límites de la realidad y las conexiones subterráneas que existen entre fantasías libertarias y quijotescas con una pesadilla gris y laberíntica, cuyos engañosos caminos en forma de tuberías desemboca

"Careful with that box Pandora", Ilustración de Félix Vega

Imagen
                                                                                                                           Texto: Miguel Higuera  No piense que quiero justificarme ni nada de eso, pero tengo que contarle cómo fue que todo sucedió, si, ya sé que somos parecidos a los dioses y que nuestra vida es un mito y todas esas cosas, pero, vea usted, no todo lo que brilla es oro, ¿sabe?, porque si bien es cierto que reencarnamos y tomamos estas formas modernas, nuestra mente todavía sigue en aquellos tiempos remotos, bueno en realidad la mía, porque mi mujer se adaptó fácilmente a estos tiempos , pero yo aun creo que mi hermano, Prometeo , usted debe conocer su historia ,espero, porque estoy seguro de que él es el culpable de todo lo que pasa por haber robado el conocimiento e los dioses y habérselo entregado a los hombres y dejarlos tan furiosos que el padre de todos se vengó, varias veces en realidad, porque así son los dioses, primero nos crean y después nos cobran eternamente p

SUDACAM , capítulo II

Imagen
                                                                        Por Miguel Higuera   Ilustración y Monocopia: Christiano                                                            Capítulo Anterior Cuando llegué al edificio de la comisaria, el tipo que parecía orquestar todo el movimiento de la policía internacional estaba junto a nuestro capitán, mirando como entraba y me dirigía calmadamente a mi oficina. Esas camionetas que usaban eran realmente rápidas , aunque también   me había tomado un tiempo sirviéndome un café fuerte en uno de mis lugares favoritos, donde me sentaba as mirar como el resto del mundo corría de un lado para otro , sin que nadie supiera de mí ni que se importara, bebiendo lentamente un café lo más amargo posible. - Hernández- llamó el capitán Cáceres, con su típico gesto sarcástico y casi silencioso, económico en sus movimientos pero certero en la ironía y en cada comentario crítico, con aires de broma inglesa- este señor quiere hablar contigo-su r